Chesterton murió en 1936. Ese mismo año publicó Maritain su Humanisme intégral, puesta a punto de las seis lecciones que pronunció en agosto de 1934 en la Universidad Internacional de Verano de Santander, publicadas asimismo en la eidtorial Signo en 1935. No sé ni veo, hoy al menos, modo de saberlo, si Chesterton leyó a Maritain; no Humanisme intégral, pero tal vez Religion et culture, Du régime temporel et de la liberté o Primauté du spirituel. Se lo tendría que preguntar al traductor de La cosa y otros artículos de fe (Espuela de Plata 2010).
De lo que no necesito confirmación es de la notable refutación avant la lettre del maritenismo (no sé si en la misma medida, debo recalcarlo, de Maritain) que se puede leer en el primero de los pasajes que Chesterton le dedica las "religiones fósiles" en el artículo "Mis seis conversiones", recogido por EG-M precisamente en La cosa.
Las "religiones fósiles", escribe Chesterton refiriéndose mayormente a las confesiones protestantes, no son, como los fósiles, animales muerto o podridos, sino una forma orgánica de la que ha desaparecido toda sustancia vital. Una sustancia de la que han desaparecido todos sus accidentes: "este tal vez sea el mejor símil que podemos encontrar para la verdad acerca de las nuevas religiones" (p. 77). Lo había dicho San Agustín, citado por Gregorio XVI en Mirabi vos: "no pierde su sustancia el sarmiento cuando está separado de la vida, pero ¿de qué le sirve si no vive de la raíz?".
Creo que en este punto se entenderá mejor el puyazo de Chesterton (me temo que dardo, menos castizo, es decir poco) al vagoroso maritenismo postconciliar: "La parte teológica y teórica de su obra se secó con extraordinaria rapidez, y con la misma rapidez el vacío que quedó se llenó de otras cosas. Qué cosas eran está muy claro en muchos casos".
2 comentarios:
Siento no poder aportar ningún dato sobre el conocimiento de Maritain que pudiera tener GKC. Y me da rabia no poder contribuir así a esta afilada entrada. El puyazo es ciertamente de aúpa.
Entrando en las tierras movedizas de las hipótesis, lo normal es que lo hubiese leído, por cercanía a la cultura francesa, por afinidades tomistas y porque Maritain alabó a Chesterton —y eso siempre despierta el interés—. Estaré muy atento, a partir de ahora.
Gracias por la entrada.
A ti, por responder al SOS.
JM
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